Pablo en su vida cotidiana
Era un día de invierno, de esos típicos días en el cual tus huesos te duelen por lo frío que están, y que repentinamente el clima se empieza a poner un poco mas calido; lo que indica sin duda alguna que va a ver truenos, relámpagos…en fin una lluvia feroz.
Era ese día de invierno cualquiera, Pablo caminaba por la comuna de Macul, en la calle Las Dalias. Caminaba hacia su casa, ya que, no tenía dinero…pero eso no le importaba ni le interesaba en absoluto. Era para el, mejor caminar que no hacer nada en su vida, de hecho aunque caminara en su vida, era la nada misma.
Pablo no sentía ni el frío del invierno, ni el calor que se avecinaba por una futura lluvia; se encontraba de una temperatura normal. No pensaba en esos momentos, solo miraba por donde iba ya que tenía que llegar a la comuna de Ñuñoa para estar en su casa, y no quería caerse en el camino.
Empezó a llover, Pablo ni siquiera se dio cuenta de que se mojaba rápidamente y que pronto estaba empapado. Solo caminaba.
Después de 30 minutos llego a algo que ya reconocía como el Estadio Nacional. Estaba ya muy cerca por llegar, una cuadra mas y llegaba a la calle Las Encinas, caminaba y dejaba pasar 1 edificio y 5 casas y llegaba.
Pablo caminaba, ya se sabia el camino así que se tomó un tiempo para pensar en el trayecto que le quedaba, no sabia que tan inteligentes eran sus pensamientos, pero se estaba preguntando por que su vida era menos vida y era mas existir. No tenía amigos, no hablaba mucho, no pensaba demasiado, no se sentía ni feliz ni infeliz, no sentía amor por nadie, no mentía, no decía la verdad, no tenía ningún tipo de vicio y para las festividades como Navidad y su cumpleaños nunca pedía nada, ya que no se le ocurría. Solo existía…comía, bebía, respiraba, cerraba los ojos, caminaba, iba al baño, dormía, se cepillaba los dientes y se bañaba. Cuando ya estaba apunto de pasar el edificio absorto de sus pensamientos, se sintió levemente triste y tenía deseos por primera vez de algo en su existencia de ser: tener una vida. En ese mismo momento pasaba la última ventana del edificio pero frenó en seco. Vio un cartel (un papel con letras escritas con plumón) que le llamo mucho la atención lo leyó atentamente y decía
“VENTA DE GARAGE
Vendemos todo lo que tenemos a precios económicos
Aproveche de llevarse lo que desea al mejor precio y calidad asegurada”
Pablo sonrió al ver este letrerito y por primera vez, se sintió emocionado, así que decidió entrar al departamento para ver si tenían lo que el quería.
Al entrar vio a una señora entrada de edad, que estaba observando todos los cachivaches que habían en la pieza, uno en particular que era una mecedora. De repente Pablo, que observaba a la señora, escuchó una voz de una mujer joven pero mayor que el. Este la vio, con la sensación que lo estaba observando demasiado…No estaba acostumbrado a que lo miraran caras nuevas de esa manera.
- ¿Desea algo joven? Aproveche, mire que luego nos vamos de aquí y se cerrará esta venta de garage. – Dijo la señora un poco mayor que Pablo.
El se quedo como callado y temeroso. De repente se sintió como si recién despertara de un sueño, que no era ni sueño ni pesadilla. Pero decidió hablar:
- Si deseo algo en particular que no se si usted tendrá, pero como decía en el cartel que vendían todo lo suyo…
-Si así es .- Dijo la señora ¿que es lo que quiere?
- Quería saber si usted me puede vender su vida. Yo no tengo sabe…yo solo existo. Y me di cuenta que quiero seriamente una. Me aburrí que no me suceda nada. De hecho esta es la primera vez que realmente puedo decir que me sucede algo…Si es que alguien me lo pregunta claro.
La señora lo miro con cara de que Pablo estaba demente, y después de un rato puso un rostro como si hubiera entendido todo…pero en realidad no sabía nada
- Hahahaha, que simpático joven, ¡que buen chiste!
-No…No es un chiste es…es la verdad señora. Usted escribió en el cartel que vendían todo lo suyo y pensé…Pues bien, que también es parte suya tener una vida. Necesito una, en serio. Para así empezar hacer la mia. No se preocupe solo la tomare para empezar… No es que quiera seguir con la suya o que me pase lo mismo que le ha pasado a usted.
La señora empezó a tener un poco de miedo. Hasta la anciana miro al joven Pablo, ya que escuchó todo, a pesar de sus años, y decidió comprar un acuario e irse lo mas rápido posible.
- Mira niñito, no se de que demonios hablas, pero no me vengas con chistes o con tus locuras...mejor andate a tu casa y déjame en paz que tengo que vender estas cosas para poder pagar el flete.
Pablo un poco desilusionado y triste, ya que no solo no vendia su vida la señora, si no que lo trato como si fuera un demente, salio del departamento y siguió su camino hacia su casa.
Después de pasar las 5 casas que le faltaba, saco su llave abrió la puerta y sintió olor a comida. No sabia cual era puesto a que nunca la había sentido. Recién se había dado cuenta que existían los olores en su casa. Dio un paso dentro del hogar y apareció una mascota de su familia, el perro Skab, que no sentía ningún cariño por Pablo, ya que Pablo nunca había sentido un cariño por el. Solo se miraban de vez en cuando, sin odio ni resentimiento, solo se observaban. Skab creía que había llegado otra persona y le iva a hacer la bienvenida, pero cuando se dio cuenta de que era Pablo, lo observo a los ojos con esa mirada tan inocua, se dio vuelta y se fue como si nada hubiera pasado.
Luego Pablo avanzo 3 pasos mas y oyó a su mama gritarle desde el baño
- Hijo ¡¿Ya llegaste?!
- Si mamà, ya llegue.
- A que bien, deja que termine el baño y te sirvo la comida.
- ¿Que hiciste de comida hoy?.-Pablo quería saber que comida era para que brotara tal aroma...Nunca había olido algo semejante
- Tortilla de acelga, arroz con curry, y ensalada de tomate.- Respondió su mama Ricarda.
- Ah….
Pablo avanzo y llego a su pieza, que no era mas que una pieza, que mas bien parecía de invitados. Solo tenia un calendario colgado en la pared que era de color blanca, tenia un mueble para guardar sus libros y cuadernos de colegio, un closet para guardar su ordinaria ropa, y una cama de una plaza que se situaba en una esquina con un cubrecama de color azul, que su mama se lo compro por que era el mas económico.
El chico se acostó en su cama y vio su blanco techo, estaba pensando que el día que ha vivido ha pensado mas de lo que nunca había pensado en toda su vida; por lo que se canso de pensar y se quedo dormido por 20 minutos hasta que Ricarda lo despertó para que comiera. Pablo se levanto y comió.
Había tomado una decisión: buscar en ese día una vida para tener, si no puede ser comprándola, podría ser investigando.
Así que al terminar de comer se cepillo los dientes y partió de la casa rápidamente, no sabia adonde diablos se dirigía…pero a algún lugar iva a llegar.
CAPITULO 2:
En busca de una vida para vivir
Tomó un micro…no sabio cual era, ni qué numero, ni hacia adónde se dirigía, solo sabía que era de las amarillas por lo que avanzaba rápido.
Decidió bajarse en un lugar que parecía un pequeño desierto, todo despejado y había solamente un gran pedazo de tierra alrededor de lo que parecía casas chuby. Nunca supo por que se bajo ahi, pero por unos instantes se arrepintió y temía por su seguridad física. Aun así demostrando tener osadía, cosa que nunca había sucedido...Decidió pasar por ese pequeño desierto, el cual al pasarlo vio a múltiples personajes de bajo presupuesto monetario, que al parecer querían hurtarle alguna pertenencia, pero como vieron que solo llevaba puesto su ropa decidieron abandonar la idea. Pablo se detuvo, vio a una anciana sentada..mas anciana que la que estaba viendo algo para comprar en la venta de garage…se acerco a ella.
- ¡Hola señora!
La señora miro no extrañada si no mas bien como si esperara que algo así sucediera, como si siempre hubiera conocido al chico.
- Hola mijito ¿Como está?
- Bien ¿y usted?
- Bien aquí esperándote.
- ¿Esperándome?.- Pablo se sorprendió, nunca nadie lo había esperado de ninguna forma, nadie esperaba nada de el… ni su mama, ni su papa. - ¿Por que esperándome?
- He esperado a alguien que me necesite de verdad y veo en tus ojos que tu eres, por eso viniste a este antro de mala vida.
- No se por qué llagué hasta aca, solo se que necesito que alguien me de parte de su vida, para yo tener una por que yo solo existo.
- Si, tu eres el que me necesita…
Pablo se emociono un poco… si la anciana no estaba loca, quizás entendió lo que Pablo quería y necesitaba.
- Mira niñito .- Dijo la anciana.- yo como vez estoy muy vieja, y moriré pronto, de hecho hoy mismo si te doy mi vida… ya que es lo único que me hace vivir. Ya no tengo edad para solo existir. Si te doy mi vida moriré. Pero no temas… tu no pasarás lo mismo que yo, ni tendrás mi edad mental, ni sentimental ni nada… solo se te dará la oportunidad de tener algo en este proceso humano.
- ¡Si eso es lo que quiero! No se por que hoy quise tener una vida. Me di cuenta que solo existo…y..
- En todo caso .- Interrumpió la vieja.- no se si notaste que ahora tienes un poquito de vida, con el solo hecho de buscarla. Algo hizo que te despertaras.
- ..Quizás fue la lluvia.
- Aun no tienes una vida completa… ¿No te has dado cuenta que ahora hay sol y no hace frío?
Se impresiono el joven, efectivamente, no se había dado cuenta de nada, mas de que tomo la micro y era amarilla...
- No, no me había dado cuenta a decir verdad... Creo que me falta mucho por aprender.
… No hubo respuesta.
- ¿Señora? .- dijo Pablo algo asustado.
…No sucedió nada…solo hubo un poco de viento
- ¡Señora despierte! .- Pablo decidió moverla…Pero nada.
La anciana había muerto.
Hubo un aire frío, mas bien congelado y Pablo se dio cuenta, empezaba a tener frío, sus huesos estaban congelándose y sus manos estaban rojas.
Empezó a ahogarse, cada vez podía respirar menos. Cada vez le costaba abrir los ojos mas. Cayo sin que el mismo se diera cuenta que se desmayo.
CAPITULO 3:
Viviendo la vida
Una mañana con sol, con un poco de nubes, que alguna que otra vez tapaba el sol, con pájaros alrededor, que nadie sabe de donde salieron. Pablo despierta en el mismo lugar que se había desmayado. Se levanta un poco asustado y atolondrado, no recordaba muy bien lo que había pasado…Hasta que después de 2 minutos recordó todo, y miro hacia donde estaba la anciana, pero ella ya no estaba, solo quedaba su silla.
Se sintió muy raro, sentía que tenia corazón, que tenia frío, hambre, que estaba triste, feliz y muchas cosas mas, cosas que nunca antes había sentido.
Se paro y estaba un poco mareado, pero no se cayo. Camino y tomo intuitivamente una micro que lo dejo en su casa.
Al llegar la mama le pidió mil explicaciones de adonde había ido. Ricarda estuvo 30 minutos dándole un sermón, que Pablo no escuchaba, no en aquel tiempo por que en los primeros 5 minutos si le puso atención. Entonces dijo algo que nadie esperaba.
- Voy a empezar a salir mama, necesito tener amistades, no puedo seguir aquí adentro de este lugar.
Su mama tenia rostro de que no le importaba mucho lo que hacia su hijo o decía, solo lo retaba para no quedar como una madre despreocupada.
- Esta bien, ya era tiempo, pero al menos avísame. Después la gente que va a pensar de mi, que no se adonde está mi hijo.
Esa misma noche salio, sentía que tenía toda una VIDA por vivir. Una vida en serio, nada de existencia. Llamo a sus compañeros (cosa que nunca lo había hecho) para que se juntaran y estos, un poco extrañados, accedieron a una junta en la noche con cerveza, algunas compañeras, y algunas que otras cosas, en casa del cabecilla de todas las fiestas de último momento.
Pablo fue y llego cuando ya estaban todos disfrutando de la noche juvenil. Empezó a hablar mas que nunca y, se dio cuenta por fin de como eran entre amigos. Hablaban de chicas, de cervezas, de autos, de cigarros, de televisión y de fútbol. Aquello lo encontró muy interesante siendo la primera vez dentro de este círculo.
Estuvo ahi charlando con sus compañeros como 2 horas; Pero era el momento del baile. Nunca había bailado, menos reggeaton, pero era el momento y nadie se daba cuenta que el era pésimo, ya que había una oscuridad total. De repente se acerca Sofía, una compañera que según el ahora que la vio, era bastante bonita. Sofía decide hablarle y bailar alrededor de el.
- Dime Pablo ¿por que decidiste cambiar así tan repentinamente? Antes no nos hablabas ni nos mirabas, todos creíamos que eras autista…seriamente
Pablo ríe
- No ¡en serio! .- Dice Sofía.- Imaginate solo decías presente en las clases. ¿Como no podíamos pensar eso? Era lo mas obvio
- Si creo que puedes tener razón, pero todo cambia.
- Si…Oye Pablo yo siempre te encontré rico en todo caso.
- ¿A si?
Sofía lo agarro y se dieron un beso. Pablo se impresiono un poco pero se quedo callado. -Así que esto era la juventud.-pensaba.
Estuvieron toda la noche juntos hablando. Sofía le dio una bebida
- Tómatelo… Tiene algo que te va a gustar y te sentirás de lo mejor.
- ¿Que es? ¿Droga?
- Oh si y de la mejor.
Pablo no lo pensó demasiado, y lo tomo de un sorbo. Luego no se acordó de nada hasta que despertó en un sillón semi desnudo junto con Sofía. Pablo se asusto. La droga era tan fuerte que ni siquiera se acordó de qué sucedió, qué pasó desde que termino el vaso. Decidió irse lo mas rápido y sigilosamente posible.
Se fue sin llamar la atención de nadie.
Caminando se pregunto que habrá hecho, y también se decía que el primer día de su existencia con vida y hace alguna estupidez, se sintió culpable (una sensación nueva, pero que no le gustaba) y no sabia que hacer.
En la casa estaba en su cama acostado, pensando que necesitaba más de esa pequeña droga, no sabia que era, pero la necesitaba, quería olvidarse de todo. En ese momento escucho a su papá … que estaba borracho llegando a su casa. Pensó en que su papa nunca había llegado borracho, pero ese día fue distinto, llego borracho y decidió golpear a Ricarda a Skub y se cayó, de tan borracho que estaba. Pablo arrancó, se sintió mal por los 2 animales que su papa había agredido (aunque uno de esos 2 fuera su mamà).
Pablo corrió paso las 5 casas y el edificio, llego y vio al Estadio Nacional. No sabia que le sucedía pero se sentía mal, pésimo… Sentía que moría lenta y dolorosamente.
CAPITULO 4:
Para vivir la vida tienes que pensarlo 6 veces.
Y así era. Sofía le puso una especie de droga-veneno, ya que odiaba a Pablo por alguna extraña razón y estaba desquiciada. Fue al psiquiatra 6 años, pero nunca dio ningún resultado y decidió retirarse.
Mientras el niño se caía lentamente, la gente lo miraba pero él cada vez veía menos a la gente.
Cayó al fin, escucho muchas voces gritando pero cada vez oía menos a la gente y mas los últimos pensamientos
“Es mejor existir que vivir.
Para vivir tienes que ser mas responsable.
Tienes que nacer viviendo.
Tienes que vivir viviendo con conciencia.
No puedes vivir existiendo.
¿Por que decidí tener una vida si era mejor existir?
O quizás todo lo hice mal.
Realmente no lo se.
Hay que pensar bien las cosas.
De ser un ser que no era nada pero estaba en el globo terráqueo, a ser una persona que empezaba a ser menos que algo y no estar en el globo terráqueo.
Prefiero la primera opción.
Moriré sin saber nada de mi vida.
Moriré…sin existir, sin vivir.
Ni siquiera supe que hice de mi vida en toda esta noche.
Quizás sea bueno morir”
Y dejo de respirar. Pablo murió por culpa de una niña psicópata, por culpa de el, y por culpa de la vida.
1 comentario:
me arrendé una vida
para poder matar
a la antigua.
no esperé
a que naciera,
le di toda mi sangre
verdadera.
sin buscar encontré algo
que me conmueve
cuando lo abro
brilla en mi cara
como un cuarzo
el sol volvió al corazzón
lo salvó de una
muerte feroz
el destino
me salvará a su vez
de la abulia
que prometió volver.
saludos
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